Fin de semana perfecto
Es un decir, claro, la ironía no se entiende bien si no es cara a cara. Por escrito o en la radio, por teléfono, hay que tener mucho cuidado con ella. El viernes me puse mala y el sábado también. Aún así no ha sido un muy mal fin de semana porque me lo he pasado muy bien. Cosas que aún me preocupan: no encuentro unas facturas y me hacen falta para el día 6 y tengo que limpiar el tejado de la cocina porque si no me van a denunciar los vecinos. Pero este finde las he dejado aparcadas, ahora ya lunes me enfrentaré a eso, pero estos días ni he tocado el ordenador ni me he enredado con mis problemas.