AMARGURA
Ayer me vinieron recuerdos muy tristes. Me encontré con unos amigos. Recordé el día del bautizo de su hija. Tenía dos exámenes en Madrid ese día, me fui al primer examen, volví para ver el bautizo, me volví a ir para el segundo examen y luego me fui directamente al convite. Hice un esfuerzo enorme por estar al plato y a las tajadas porque eran muy importantes para mi. Ayer nos vimos y la frialdad se cortaba. Te pones a imaginar lo que les pasa por la cabeza y no es bueno. No es bueno para mi. Pienso si estaran arrepentidos, pienso si se sentirán incómodos por mi culpa. Pienso en lo que he hecho mal y en lo que ellos hicieron mal. Debería olvidar esa parte de mi vida. Es porque no estoy bien que dejo que esas cosas otras vez vuelvan a hacerme daño. No quiero convertirme en una amargada. La vida es dura para todos. Pero hay heridas en el corazón que son muy difíciles de cerrar. Es más fácil olvidar un amor que a unos amigos.
Comentarios
Yo en tu lugar me quedaría en paz conmigo mismo. A lo hecho, pecho, y lo que no se puede cambiar, mejor dejarlo como está.
Yo, claro. Pero cada cual es cada cual.
De todos modos, te deseo ánimo.
Forastero no sé qué piensan, no sé siquiera si piensan en mí. El tiempo es el olvido.