No quiero currarme este blog, trabajar para él, quiero que él trabaje para mí, él es mi instrumento, yo no soy su esclava, él es mi esclavo. Él es el que me tiene que proporcionar buenos momentos. Si un día se muere será culpa suya, no me sentiré culpable, si un día no tengo nada más que decir será porque él ya no cumple su función. Ni siquiera sé en este momento cuantos posts llevo, no sé cuantos comentarios habéis dejado, yo he dejado casi la mitad porque siempre os contesto. No es cuestión de números. No es cuestión de años de dedicación, no lo hago ahora mejor que antes, ni peor. Es cuestión de tener algo que decir. Lo que importa es el contenido. No es la forma, ni que la plantilla tenga flores o música, muchos links o pocos, un cursor que haga el tonto en forma de merlín o estrellitas, que el fondo sea rosa o negro. Lo sé porque leo muchos, en estos momentos 257, no consigo bajar, como mucho subo, por más que elimine es inútil, siempre un blog me lleva a otro y me lo agrego. Los
Comentarios
Las dos primeras las he visto, aunque hace tiempo. La primera es esa de Audrey Hepburn no? una morenita delgadiiiiita poquita cosa pero con un rostro impresionante. Sí, la he visto.
Cómo me divertía con las comedias de antes, recuerdo haberme pasado horas riéndome con Jack Lemmond. Cuidaban mucho los guiones. Ahora las comedias se basan más en el trompazo y las caídas espectaculares, que también me hacen reír, claro xDDD. Es un humor menos inteligente, aunque más vistoso, si acaso.
Te mando un beso de película, hala :*
Es la de Audrey Hepburn, sí, lo malo es el Fred Aistare, que en esta peli podría ser su abuelo y pretenden hacernos creer que se enamoran, en fin, por ser vos quien sois me lo tengo que tragar.
La otra es divertidísima, sin trompazos tontos, es de Billy Wilder mi director favorito y la puedes ver mil veces que mil veces te reiras.