EL COCHE

Pobrecito, lo cuido de mal. Dentro de poco lo voy a llevar a reparar los chichones, no todos porque si no me paso de partes y la compañía me cruje con la subida, pero sí los más importantes. No le llevo nunca al taller. Tampoco es tan mayor, va a cumplir ahora tres años. Pero lo trato mal, no sé mirar el aceite ni las ruedas. Aún no he llegado a los cincuenta mil kilómetros. Es un peugeot 206 porque era el que le gustaba a la niña. Para mí todos son iguales, no sé diferenciar uno de otro. Aunque los lleve no me quedo con la marca ni el modelo. Todos tienen un volante y cuatro ruedas. Los conduzco igual, qué más da. Hombre este tiene dirección resistida si me toca pillar el de mi madre sufro mucho que no la tiene.
He tenido tantos que no los aprecio. Este es el tercero nuevo que me compro pero mi padre me compro montones de ellos de segunda mano. Cuando nadie tenía coche yo sí. No por privilegiada sino porque a mis padres no les gustaba conducir y querían chofer. He tenido el coche de los picapiedra y he visto la carretera a través de los agujeros, he tenido seiscientos, mini, de los pequeños casi todos.
Un día mi padre me dejó uno automático, se lo habían prestado para ver si se lo vendían, pero no lo compró gracias a Dios. Me metí con él en la calle del hielo, no se llama así, pero como había una fábrica de hielo se quedó con ese nombre. Esa calle es tan estrecha que tuve que hacer maniobra para doblar la esquina. Y maniobrar con un automático no es como con uno normal. Lo pasé fatal. Al día siguiente no arrancaba y me empeñé en llevarlo a la universidad, quería fardar de cochazo, lo empujé hasta sacarlo a la calle y paré a uno para que me empujara, pero no funcionó, los automáticos como no tienen embrague no se pueden arrancar empujándolos, todo ese esfuerzo para nada.

Comentarios

Anónimo ha dicho que…
Te equivocas. Los automáticos tienen engranajes como los convencionales, hay que ponerlos en la N para empujarlos y luego meterle la D, con el contacto puesto. Yo encendí dos así. Lo malo es que, entre la N y la D está la R, de retroceso así que si eres poco experimentada, mejor intentarlo marcha atrás, para no liarse con las letras. Bueno, olvídalo. Si eres poco experimentada mejor no hagas nada marcha atrás juasjuasjuas xD

;)

Qué guarro soy...

Bueno, el caso es que yo sí que presumía porque trabajaba en un taller de coches (ya lo dije en mi penúltimo post) y los manejaba a los doce años ya. Era una sensación de poder inenarrable pasar por delante de las bocas abiertas y los ojos como platos de las chicas y colegas, a los 15 añitos, conduciendo mi flamente... Seat 850

juAAAAAAAAAAAA xDDD

Y por supuesto, de tanto manejar en el taller, aparcando soy un maestro. OLEEEEE
vitalidad ha dicho que…
Lo que yo decía, necesito un mecánico ¿quieres serlo tú? Yo te llevo el coche dónde haga falta, jajajaja.

Entradas populares de este blog

ABRAZO MORTAL

QUE VAGA SOY...